Hielo y Fuego Wiki
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Sinopsis[]

Jon Nieve desayuna cuando Samwell Tarly llega emocionado y le dice que fue aceptado como un hermano de la Guardia de la Noche al mismo tiempo que los demás. Su deber será ayudar al maestre Aemon con la biblioteca y con los pájaros ya que necesita a alguien que sepa leer y escribir cartas. Sam está preocupado por no llegar al Septo tarde, ya que teme puedan cambiar de opinión. Los oficiales de alto rango llegaron todos juntos y tras ellos entraron los miembros mayores del resto de las órdenes: el Lord Mayordomo Bowen Marsh, el Primer Constructor Othell Yarwyck, y Ser Jaremy Rykker, que estaba al mando de los exploradores durante la ausencia de Benjen Stark. El Lord Comandante hace su habitual discurso para tomar los votos y ser miembro de la Guardia. Luego pregunta si hay alguno que no quiera seguir allí, si es así, que se vaya ahora, sin demérito alguno. Porque cuando vistan el negro ya no habrá vuelta atrás, la deserción se pena con la muerte. Nadie se movió. Mormont les dice que prestarán juramento allí, al anochecer, ante el septon Cellador, y luego pregunta si alguno de ellos adora a los antiguos Dioses. Jon se pone en pie ya que por las venas de los Stark corre la sangre de los Primeros Hombres y entonces Mormont le dice que prestara juramento ante un arciano.

Los reclutas susurran que no hay Bosque de Dioses en el Castillo Negro y Mormont confirma que no hay necesidad ya que más allá del Muro, en el Bosque Encantado a media legua de allí hay un bosquecillo de arcianos, donde estuvo en la Era del Amanecer, mucho antes de que los ándalos trajeran a los Siete del otro lado del mar Angosto. Samwell dice que él también quiere prestar juramento ante un árbol de corazón, ya que a pesar de que había sido criado en la Fe de los Siete, estos nunca le habían respondido  sus oraciones. Al final de la ceremonia, el Lord Comandante anuncia las asignaciones: Halder y Albett a los constructores; Grenn, Pypar, Todder y Matthar a los exploradores; Samwell, Dareon y Jon a los mayordomos. Jon queda estupefacto, pero luego ve una sonrisa en la cara de Ser Alliser Thorne. El Lord Mayordomo Bowen Marsh les dice que Samwell ayudará al maestre Aemon con los pájaros y en la biblioteca y Chett para que Samwell ocupe su celda. Dareon, que ha cantado ante señores de gran alcurnia, irá a Guardiaoriente del Mar para que su facilidad de palabra le sea de ayuda a Cotter Pyke cuando lleguen las galeras mercantes para comerciar. Jon será el mayordomo personal de Mormont, a pedido suyo, y dormirá en una celda bajo sus habitaciones en la torre del Lord Comandante. Jon sarcásticamente pregunta si le servirá las comidas, le ayudará a abrocharse las ropas y le calentará el agua para el baño, a lo que Bowen le agrega llevar los mensajes que le ordene, mantener el fuego encendido en sus habitaciones, cambiarle a diario las sábanas y las mantas, y hacer cualquier cosa que le ordene. Jon disgustado le pregunta si lo toman por un criado, y el maestre Aemon le responde que lo tomaron por un hombre de la Guardia de la Noche, pero puede que fuera un error.

Jon está decepcionado, pero Samwell tiene otro punto de vista y le dice que estará con el Lord Comandante día y noche. Le escribirá lo que le dicte, lo ayudará en las reuniones y será su escudero en el combate, estará tan pegado a él como su sombra. Observará, escuchará y aprenderá, por qué iba a escogerlo personalmente si no era porque quiere educarlo para el mando. Jon piensa que Samwell tal vez tiene razón, ya que su padre Lord Eddard Stark hacía que su hermano Robb Stark formara parte de los consejos en Invernalia. Le responde testarudo que no es lo que él quería y Samwell le recuerda que ninguno de ellos esta allí porque haya querido. Jon se avergüenza y piensa que tiene que tener el valor para aceptar su destino como un hombre y él no es un explorador. “En el Muro, cada hombre tiene lo que se gana” le había dicho Benjen Stark la última noche que Jon lo vio con vida. Jon comprende y dice que se ha comportado como un crío, su reacción no es digna de un hermano de la Guardia. Samwell le pregunta si prestará juramento con él, a lo cual le contesta que los antiguos dioses los están esperando.

Se pusieron en marcha a última hora de la tarde, cruzando el Muro a través del túnel angosto excavado en el hielo. En tres ocasiones se encontraron el camino bloqueado por rejas de hierro, y tuvieron que detenerse mientras Bowen sacaba las llaves y soltaba las enormes cadenas que las cerraban. Cuando cruzan Samwell se preocupa de que los salvajes no se atrevan a acercarse tanto al Muro. Jon llama a Fantasma que cruza con él, pero en un instante echa a correr y desaparece entre los árboles. En un pequeño claro en lo más profundo del bosque crecen en círculo nueve arcianos. Ni siquiera en el Bosque de los Lobos se podían ver más de dos o tres de aquellos árboles blancos juntos. Las nueve caras miran hacia adentro y no hay dos iguales. Bowen les ordenó que dejaran los caballos fuera del círculo ya que es un lugar sagrado, y no deben profanarlo. Cae la noche cuando Jon y Samwell dicen sus votos. Al terminar, en tono solemne, Bowen Marsh les dice que se arrodillaron como niños y se levantan como hombres de la Guardia de la Noche. Los exploradores se congregaron a su alrededor, sonrientes, para felicitarlos. Todos excepto Dywen, que aconseja volver ya que está oscureciendo, y esa noche hay un olor que no le gusta. De pronto, Fantasma vuelve con ellos, aparece caminando con pasos silenciosos. Jon advierte que tiene el "Pelaje blanco y ojos rojos. Igual que los árboles." El lobo llevaba algo negro entre los dientes, cuando se aproxima ven que es una mano.

Personajes[]

Aparecen[]


Mencionados[]

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