Hildy es una vivandera de las Tierras de los Ríos.
Apariencia[]
Hildy es descrita como una mujer de nariz respingona y una mata de pelo indómito.
Eventos Recientes[]
Danza de Dragones[]
Hildy era la amante de una espada juramentada de Lord Tytos Blackwood, hasta que Lord Jonos Bracken lo mató y la reclamó como botín de guerra. Es atrapada en la cama con Lord Jonos por Ser Jaime Lannister, cuando éste entra sin previo aviso en la tienda de Bracken durante el asedio de Árbol de los Cuervos. Se levantan rápidamente y ella pone una mano entre las piernas y la otra en el pecho izquierdo, con lo que el derecho quedaba expuesto, pero al percibir la mirada de Jaime, se cubrió el seno derecho, dejando el pubis a la vista. Le dice a Jaime que no ha dejado de mirar sus berzas desde que ha entrado, y apartándose el pelo de los ojos, que además, no están en venta.
Jaime le hace notar a Bracken que se está poniendo los calzones al revés, y cuando este deja escapar una maldición. La mujer aprovecha para salir de la cama y recoger su ropa dispersa, cubriéndose los pechos y el sexo con manos nerviosas cada vez que se agachaba o estiraba un brazo. Sus esfuerzos por taparse resultaban más provocativos que la asunción de la desnudez. Se puso una camisa manchada y sacudió la cabellera. Tenía la cara casi tan sucia como los pies, y mucho vello entre las piernas, pero aun así tiene algo que le resultaba realmente atractivo a Jaime: la nariz, el pelo indómito, o la pequeña reverencia que hizo después de ponerse la falda. Le pregunta a Lord Bracken si ha visto el otro zapato y este se ofende ante la pregunta respondiéndole que no es una criada, para andar buscándole los zapatos y que se largue igualmente descalza. Hildy le pregunta a Bracken riéndose, si ya no va a llevarla a su casa a rezar con su esposa y coquetea con Jaime lanzándole una mirada insinuante. Le dice que le gustan los hombres con manos de oro y le pregunta cómo le gustan a él las mujeres. Este le explica a Hildy con cansancio que ha hecho votos y ella se burla de Jaime ante Lord Jonos respondiéndole que entonces se quedará sin berzas. Lord Jonos le grita que se vaya y se marcha, pero no sin antes darle un apretón a Jaime por encima de los calzones y recordarle su nombre antes de salir medio desnuda de la tienda. “Hildy”, pensó Jaime.[1]
Referencias[]
- ↑ Danza de Dragones, Capítulo 48, Jaime.
